Para 6 personas
- 500 gr de garbanzos
- 2 cebollas grandes
- 4 tomates grandes maduros
- 4 rebanadas de pan
- 1 litro de caldo de pollo
- 5 huevos
- 4 dientes de ajo
- perejil picado
- laurel
- Aceite de oliva
- sal
Elaboración:
La noche antes ponemos los
garbanzos en remojo en una cazuela con agua hasta cubrir.
Escurrimos los garbanzos y
los ponemos a cocinar con el caldo Aneto hasta cubrir los garbanzos, si no es
suficiente incorporamos un poco de agua y las hojas de laurel, los tendremos
cocinando hasta que se ablanden, lo mejor es hacerlo a fuego lento.
Ponemos aceite en una
sartén y sofreímos los ajos hasta que doren un poco y los retiramos y ponemos
dentro de un mortero, en ese aceite freímos las rebanadas de pan y una vez
realizado sacamos y ponemos sobre papel de cocina para quitar el exceso de
aceite, ahora cortamos las cebollas en trocitos y ponemos a pochar en la misma
sartén, dejamos hasta que empieza a transparentarse y añadimos los tomates
previamente rayados, echamos una pizca de sal y una pizca de azúcar y dejamos
cocinar.
En un cacito pequeño
ponemos los huevos a cocer y cuando estén hechos los pelamos y 2 de ellos los
troceamos en rodajitas y los otros por la mitad y reservamos.
En el mortero con los ajos
incorporamos el pan frito y el perejil y majamos todo hasta obtener un pasta
que echaremos con la cebollita y el tomate daremos un par de vueltas y se lo
incorporamos al guiso de los garbanzos y dejamos cocinar junto 8 minutos ,
pasado ese tiempo probamos el punto de sal y rectificamos y añadimos los huevos
picados y las mitades y dejamos cocinar otros 5 minutos junto pasado ese tiempo
ya tenemos nuestro guiso listo para comer.
Receta elaborada con el
menaje de hostelería y cocina de la fábrica Supreminox en Vilassar de Mar
(Barcelona)
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